2. Diseña tu estilo
2. Diseña tu estilo
El concepto más importante: el riesgo. En primer lugar vamos a ver qué es exactamente, vamos a identificarlo para saber si estamos dispuestos a aceptarlo a cambio de una mayor rentabilidad.
Un concepto que parece difuso cuando hablamos de ahorros, pero que refleja la incertidumbre, la probabilidad de no recuperar nuestro dinero, la inseguridad de no obtener la rentabilidad que esperábamos.
El riesgo aparece cuando tus ahorros no están garantizados, cuando el producto de ahorro que contratas no te garantiza la devolución del 100% de tu inversión.
El riesgo aparece cuando contratamos un producto con una rentabilidad que no es fija, es decir, cuando la rentabilidad es variable, porque no sabemos lo que podemos ganar o perder.
Actualmente la única opción completamente libre de riesgo son las cuentas corrientes, cuentas de ahorro y los depósitos bancarios.
Nos garantizan una rentabilidad fija, pase lo que pase, conocemos de antemano nuestros beneficios. La mala noticia es que esta rentabilidad es baja si la comparamos con otras opciones.
Así que tendremos que preguntarnos si nos es suficiente, o si nos atrevemos a buscar otras opciones con una mayor rentabilidad, pero con cierto riesgo: Depósitos Estructurados, Bonos Estructurados, Fondos de Inversión o Planes de Pensiones.
El riesgo es un simple porcentaje que mide cómo varía tu rentabilidad, es decir, te indica cómo se mueve la rentabilidad de tu inversión. En términos matemáticos el riesgo es la “desviación estándar” de la rentabilidad.
Asumir un riesgo de un 5% supone que el valor de tu inversión varía de media un 5%.
Cuanto más volátil sea el producto que hemos contratado, corremos el riesgo de sufrir una mayor pérdida de nuestra inversión, pero también podemos llegar a ganar mucho más.
Si queremos buscar opciones con mayor rentabilidades, tendremos que estar dispuesto a asumir mayor riesgo. Esto no significa que nos tengamos que volver locos, no se trata de jugar a la ruleta
Cada uno tiene que definir su propia estrategia de inversión para encontrar las opciones que más se ajusten a su nivel de ambición, y encontrar un punto donde esté dispuesto a asumir un nivel de riesgo.
El equilibrio entre el Riesgo que presenta cada opción versus la Rentabilidad.
Recordemos que la rentabilidad es volátil y es por esto que aparece el riesgo. Sucede especialmente con los fondos de inversión y planes de pensiones.
En el siguiente capítulo veremos cómo podemos unir los términos de rentabilidad y riesgo para saber cómo construir una buena combinación.